Argentina y Brasil empataron en un clásico caliente: el título se define el domingo
El equipo de Diego Placente y el "Scratch" igualaron a uno con goles de Echeverri y Rayan, y el título del Sudamericano se dirimirá el fin de semana.

Argentina y Brasil protagonizaron un emocionante encuentro y empataron 1-1 en la anteúltima fecha del Sudamericano Sub-20, que el domingo define al campeón del certamen.
Los goles fueron convertidos por Claudio Echeverri, a los 40 minutos del primer capítulo para la “Albiceleste”, y de Rayan Vitor para la “Canarinha”, a los 33 de la segunda parte.
El termómetro del primer tiempo lo manejó el equipo de Diego Placente. Prácticamente todos los futbolistas argentinos, a excepción del arquero Jeremías Martinet, estuvieron plantados en territorio brasileño durante gran parte de la primera etapa.
Aunque la intensidad, la voracidad y la efectividad del primer partido, de aquel 6-0, no fueron las mismas, la “Albiceleste” fue superior y generó las mejores chances de gol del encuentro. Los dirigidos por Ramón Menezes se replegaron constantemente y, como única opción de ataque, buscaron a Pedrinho Santos cada vez que pudieron, que no fueron muchas.
El “Diablito” fue, como de costumbre, quien se hizo cargo del juego argentino. Se asoció muy bien con los delanteros Ian Subiabre y Santiago Hidalgo -ambos con buenas intervenciones a lo largo del partido- y también con los laterales Dylan Gorosito y Julio Soler, quien terminó siendo clave para la apertura del marcador.

El marcador de punta por izquierda que surgió de las inferiores de Lanús atacó permanentemente por su banda y le generó más de un inconveniente al costado derecho de la defensa “verdeamarela”, conformada, principalmente, por Igor Serrote y Gabriel Moscardo.
En una de sus buenas trepadas sobre el final del primer tiempo, y tras un buen control de pie a pie, Breno Bidón le cometió penal a Soler y se abrió una ventana explícita para abrir el resultado.
El encargado de ejecutar fue el chaqueño Echeverri. El arquero Felipe Longo le apuntó uno de sus palos para intentar incomodarlo, pero lejos de hacerlo, el “Diablito” la picó con una soberbia categoría en esa dirección, mientras que el guardameta se tiró al otro.
La ventaja en el marcador le permitió a Argentina tomarse un descanso con la pelota. La manejó a su gusto y comodidad, en tanto que el seleccionado brasileño no pudo contraatacar claramente casi en ninguna ocasión.
El complemento fue muy parecido al primer tiempo, aunque la “Canarinha” no se replegó tanto y salió a jugar varios metros más adelante. Sin embargo, el dominio del balón siguió siendo argentino y las patadas de los brasileños fueron cada vez más vehementes.
El equipo de Placente intentó jugar con el nerviosismo del conjunto rival y por momentos lo logró, pero sobre el tramo final Brasil avanzó en el terreno de juego y comenzó a generar problemas en la defensa argentina como en casi ningún momento en este partido y menos en el anterior.
A menos de quince minutos para el final, Igor Serrote robó una pelota en la mitad de la cancha, trasladó unos metros y habilitó a Rayan Vitor, quien irrumpió en el área argentina y definió fuerte, cruzado, abajo y de derecha al palo cruzado de Martinet para el 1-1.
El árbitro uruguayo Mathías De Armas pecó, quizás, de inexperto, y no sacó ninguna tarjeta roja a ningún futbolista brasileño, siendo que el “Scratch” disputó el encuentro con una fuerza bruta y, por momentos, desleal. Igor, sobre el final, pegó una patada a la altura de la cintura de un futbolista argentino y el colegiado decidió no expulsarlo.
Los minutos finales fueron frenéticos y de ida y vuelta. Ambos equipos tuvieron sus chances para llevarse el triunfo y coronarse campeón, pero a ambos les faltó contundencia para ello.
El Sudamericano se definirá el próximo domingo. Argentina y Brasil tienen diez puntos cada uno y jugarán sus partidos definitorios ante Paraguay y Chile, respectivamente.